El Mirandés logró una valiosa victoria por 0-1 en El Plantío, llevándose los tres puntos en el derbi burgalés frente al Burgos. En un duelo que prometía intensidad, los equipos no decepcionaron desde el pitido inicial. El conjunto visitante arrancó con una presión alta, buscando controlar el ritmo y poner en apuros a la defensa blanquinegra. El Burgos, por su parte, tardó unos minutos en asentarse, pero una vez lo hizo, comenzó a generar peligro.

Durante la primera mitad, ambos equipos tuvieron acercamientos interesantes, aunque sin la puntería necesaria para romper el marcador. El Mirandés aprovechaba las segundas jugadas, mientras el Burgos encontraba dificultades para conectar con sus hombres de ataque, fallando en las combinaciones clave en el centro del campo. Sin embargo, la igualdad predominó, dejando un partido abierto de cara al segundo tiempo.

Dominio del Burgos y golpe del Mirandés

Tras el descanso, los pupilos de Bolo salieron con mayor decisión, haciéndose con el control del balón y generando varias ocasiones de peligro. Dani Ojeda y Íñigo Córdoba estuvieron cerca de inaugurar el marcador, pero el guardameta del Mirandés, Raúl Fernández, respondió con reflejos impecables, manteniendo a su equipo en el partido.

A medida que los minutos avanzaban, el Burgos se volcaba al ataque, buscando desesperadamente el gol que les diera la ventaja. La entrada de Edu Espiau aportó más dinamismo, pero el conjunto de Alessio Lisci, bien organizado defensivamente, aguantó el chaparrón. Y cuando parecía que el gol de los locales era cuestión de tiempo, el Mirandés dio el golpe definitivo.

En el minuto 81, tras un saque de banda, Hugo Rincón aprovechó una jugada fortuita para batir a Cantero, haciendo el 0-1 que sorprendió a los más de 11.000 espectadores presentes en el estadio. El tanto dejó helados a los blanquinegros, que vieron cómo el derbi se les escapaba.

El final: Protestas y VAR sin éxito

El Burgos no se dio por vencido y en los últimos compases del encuentro buscó el empate con más corazón que cabeza. En el tiempo añadido, el equipo local reclamó un penalti por mano de Tachi dentro del área, pero tras la revisión del VAR, el árbitro decidió no señalar la pena máxima. En la última jugada, un intento a balón parado de los locales terminó sin éxito, sellando así la victoria del Mirandés.

Este triunfo no solo permite al conjunto rojillo sumar su primera victoria a domicilio de la temporada, sino que también deja al Burgos con su segunda derrota en casa, superando ya el número de derrotas como local en toda la campaña anterior.

Ficha técnica

• Burgos (0): Cantero; Arroyo (Thomas, m. 84), Aitor Córdoba, Licha, Florian Miguel (Pipa, m. 84), Íñigo Córdoba, Atienza (Espiau, m. 73), Morante, Borja Sánchez (Curro, m. 57), David González, Fer Niño (Dani Ojeda, m. 57).

• Mirandés (1): Raúl Fernández; Hugo Rincón (Eguiluz, m. 87), Juan Gutiérrez, Tachi, Tomeo, Julio Alonso, Reina (Homenchenko, m. 87), Gorrotxategui, Lachuer (Víctor Parada, m. 73), Izeta (Joel Roca, m. 57), Panichelli.

Gol: 0-1, m. 81: Hugo Rincón.

Árbitro: Palencia Caballero (Comité Vasco). Amonestó a Fer Niño, Atienza, Dani Ojeda, Íñigo Córdoba y Espiau (Burgos); y a Raúl Fernández, Hugo Rincón, Víctor Parada y Panichelli (Mirandés). Expulsó al preparador físico del Mirandés (m. 90).