El Real Madrid confía su remontada ante el Arsenal a la magia del Bernabéu y al talento de sus figuras. Ancelotti duda entre Modric y Lucas Vázquez, mientras que Thomas Partey apunta a estar disponible.

La estadística es implacable: el Madrid solo tendría un 4% de opciones de clasificar esta noche. Pero la historia blanca en la Champions eleva esa probabilidad al 50%. A lo largo del tiempo, el club ha demostrado que los números muchas veces no cuentan cuando se trata de noches grandes en Chamartín. La fe volverá a ponerla la afición, la más entregada del mundo, mientras que el equipo deberá ofrecer un fútbol que ha brillado por su ausencia gran parte del curso. El duelo será decisivo para el futuro de Ancelotti y también puede marcar el inicio de una renovación profunda en la plantilla.

Pese al resultado adverso de la ida y a las sensaciones del equipo, el Madrid aún tiene algunas cartas por jugar. Una de ellas es la plaga de bajas del Arsenal, que aunque no pesaron en Londres, podrían ser clave hoy. Arteta sigue sin recuperar a los lesionados del primer partido (Gabriel Magalhães, Calafiori, Tomiyasu, Havertz y Gabriel Jesús), pierde además a Jorginho, y mantiene en duda a Ben White y Thomas. Este último, sin embargo, se entrenó con normalidad y todo apunta a que será titular. Arteta reservó a varios titulares en Premier el fin de semana y podría repetir el mismo once del primer duelo. Si Thomas no está al cien por cien, Merino tomaría su sitio natural y Trossard sería la referencia ofensiva.

El Bernabéu, cómo no, es otro de los grandes argumentos a favor del Madrid. La mayoría de los jugadores del Arsenal nunca han jugado en un estadio con semejante presión y mística. Y tampoco tienen una gran trayectoria en esta competición. Saka suma solo 15 partidos en Champions, Rice 20, Odegaard y Raya 19, Martinelli 16… Enfrente estarán veteranos curtidos en mil batallas: Modric (141 partidos en Champions), Courtois (87), Mbappé (86), Rüdiger (68), Vinicius (67), Valverde (65)…

Cuatro que deben despertar

Aún así, el Madrid necesita algo más que experiencia y el empuje de su público para intentar el milagro. Contra el Alavés firmaron su primer partido sin encajar en diez intentos, pero un solo gol del Arsenal puede hacer saltar todo por los aires. Además, los llamados a marcar la diferencia no llegan en su mejor momento. Rodrygo, experto en noches decisivas, solo ha marcado una vez (ante el Atleti) en los últimos dos meses y medio. Vinicius lleva uno en seis encuentros. Mbappé atraviesa una racha de cuatro partidos sin anotar, y de sus 13 goles, Bellingham no ha marcado ninguno en los grandes partidos.

Tchouameni, clave en el equilibrio del equipo, volverá al once. Valverde será su escudero. Eso deja fuera a Modric de inicio y a un Ceballos aún sin ritmo. Lucas Vázquez podría entrar por la derecha, ya que aporta más ofensivamente, pero el hecho de que Modric no jugara ni un minuto ante el Alavés levanta sospechas. Fran García ocupará el lateral izquierdo tras los problemas de Alaba ante Saka en la ida.

El joven extremo inglés, de origen nigeriano, es el arma más peligrosa de Arteta. Con 23 años, Saka representa el futuro del club. Formado en la cantera del Arsenal desde los 9 años tras pasar por Watford, con 17 ya estaba en el primer equipo y a los 19 debutó con Inglaterra. Esta temporada lleva 10 goles y 14 asistencias, el doble que cualquier compañero. En la ida, fue una pesadilla para la defensa blanca.

El misil llamado Rice

Si Saka fue una joya encontrada sin coste, Rice es la inversión más fuerte del club. Arsenal pagó casi 120 millones al West Ham por él en 2023. El Chelsea lo descartó con 14 años, curiosamente, y ahora pelea con Rodri por ser el mejor centrocampista de la Premier. Con pasado en la selección irlandesa juvenil, eligió Inglaterra y llegó a los ‘gunners’ como campeón de la Conference League y MVP del torneo. Su impacto ha sido inmediato. Él mismo asegura que el equipo ha madurado y está listo para romper con la imagen de un Arsenal frágil en las grandes noches.

El Madrid contra el mundo

Las estadísticas pintan un panorama complicado para los blancos. El Arsenal no ha perdido ningún partido esta temporada que lo dejara eliminado esta noche, mientras que el Madrid solo ha ganado por tres goles de diferencia en tres ocasiones este año. Aun así, el equipo inglés haría mal en confiarse: el Real Madrid en Champions nunca ha sido lógico, ha sido legendario.