El Celta de Vigo volvió a la senda de la victoria de la forma más meritoria posible: llevando a cabo una primera parte fantástica y aguantando gran parte de la segunda con nueve

¡Volvió el fútbol al Estadio de Gran Canaria! El feudo canario fue el escenario para que el colista y una de las grandes revelaciones en lo que llevamos de competición midieran fuerzas en la novena jornada de LaLiga.

El Celta de Vigo llegaba a la isla como gran favorito y, a la misma vez, con la necesidad de volver a sumar de tres para dejar atrás la racha de tres encuentros sin conocer la victoria. Los de Giráldez tenían ante sí un partido de esos a los que podría denominarse como «trampa», puesto que ese favoritismo podría jugar en su contra y en frente tendrían a un equipo que, a pesar de no haber logrado vencer en estas ocho primeras jornadas, seguramente ha merecido más. 

Un ‘Panda’ anda suelto por Las Palmas

El club vigués demostró desde el pitido inicial del colegiado que ni mucho menos les temblaría el pulso por asumir el peso del partido y monopolizar la posesión de balón. Las Palmas comenzaó dando un paso atrás y formando un bloque muy compacto en tareas defensivas con la intención de hacer que pasara el tiempo, que al Celta comenzaran a entrarle las prisas y pudieran aprovechar alguna ocasión a la contra para hostigar la meta de Guaita. 

Sin embargo, este planteamiento de Carrión no resultó fructífero, ya que en la primera media hora de juego los celestes ya habían conseguido perforar la portería local hasta en dos ocasiones. La primera de ellas fue una acción muy rocambolesca en la que Mingueza la puso con música desde el costado diestro, Borja Iglesias remató y estrelló el esférico en la madera, el rechace le cayó a un Williot que disparó de primeras y el balón volvió a golpear en el palo antes de traspasar la línea de gol. El tanto del futbolista sueco no acabaría subiendo al luminoso por fuera de juego del ‘Panda’. Asimismo, pocos minutos más tarde, como si los visitantes tuvieran estudiada y memorizada a la perfección esa acción, Mingueza y Borja llevaron a cabo una jugada idéntica que, esta vez sí, supuso el primer gol del encuentro. El ex de Betis y Leverkusen solo tuvo que rozar levemente el esférico para hacer que éste se estremeciese en la red de la meta defendida por Horkas. 

El 0-1 en el luminoso ni mucho menos disminuyó la superioridad celeste que, con el paso de los minutos, fue a más hasta prácticamente someter a Las Palmas en su propia área. En este contexto hubo un futbolista que, con permiso de Mingueza, destacó entre sus compañeros y no es otro que Hugo Álvarez. El desparpajo, la capacidad de desborde y la resiliencia de intentarlo una y otra vez por esa banda izquierda hicieron de Hugo uno de los jugadores más destacados de una primera parte que, a pesar del asedio visitante, concluyó con 0-1. 

Dos expulsiones a los celestes protagonizaron la segunda parte

Las Palmas enfiló el túnel de vestuarios con una sonora pitada de una afición amarilla que cada vez se harta más del fútbol y los resultados de su equipo. Pues bien, esta llamada de atención de su afición pareció servir de poco, ya que la segunda parte comenzó de la misma manera que había terminado la primera. 

El Celta continuó dominando el partido a su antojo y parecía el segundo tanto a favor de los visitantes parecía cuestión de tiempo hasta que, de pronto, dos expulsiones en apenas dos minutos cambiaron por completo el rumbo del partido. Ilaix Moriba, en primera instancia, vio la segunda cartulina amarilla y abandonó el terreno de juego dejando a sus compañeros en inferioridad numérica. Esta controvertida decisión del colegiado provocó que la tensión se incrementara en el choque y, apenas un minuto más tarde, Iago Aspas correría la misma suerte que el ex del Valencia tras protestar al colegiado desde la distancia. El enfado del capitán celeste fue tal que incluso llegó a pedirle a sus compañeros que abandonaran el terreno de juego y le hicieran saber al mundo entero el incomprensible arbitraje que estaban recibiendo. 

Puede resultar complejo de creer, pero con nueve el Celta continuó mostrándose superior , con Pablo Durán liderando el ataque junto a Tasos Douvikas y apenas sufrió defensivamente. El de a Tomiño no dejó de hostigar la meta rival buscando el segundo tanto para los celestes .

Januzaj fue, junto con Moleiro, el único futbolista por parte de los locales capaz de dar un paso al frente, pedir el balón e intentar aprovechar la inferioridad numérica de su oponente. Sin embargo, el ímpetu del ex de la Real Sociedad resultó insuficiente ante un Celta que, sabiendo leer a la perfección el partido, juntó líneas, formó un bloque muy compacto defensivamente e impidió que Las Palmas rescataran un punto en su propia casa. 

Ficha técnica

Alineación Las Palmas: Horkas, Viti, Álex Suárez, Juanma Herzog, Álex Muñoz, Javi Muñoz, Essugo, Januzaj, Fabio Silva, Alberto Moleiro y McBurnie.

También jugaron: Jaime Mata, Fuster, Benito Ramírez, Marc Cardona, José Campaña.

Alineación Celta de Vigo: Guaita, Marcos Alonso, Startfelt, Manquillo, Moriba, Fran Beltrán, Mingueza, Hugo Álvarez, Williot, Iago Aspas y Borja Iglesias.

También jugaron: Javier Rodríguez Galiano, Pablo Durán, Cervi y Douvikas.