El Athletic Club vuelve a escena europea con un reto mayúsculo: salir con vida del siempre intimidante Ibrox Stadium, donde la noche del jueves (21:00, Movistar) se medirá al Rangers en la ida de los cuartos de final de la Europa League. Los de Ernesto Valverde, que llegan con la ilusión intacta por seguir soñando con su primer título continental, saben que el margen de error es mínimo en una eliminatoria que se resolverá la próxima semana en San Mamés.

Pese a los elogios lanzados por Barry Ferguson en la previa, señalando al Athletic como “el mejor equipo del torneo” y “favorito claro”, Valverde ha optado por devolver la cortesía con fina ironía. “Para mí también el Rangers es el mejor equipo y el favorito”, deslizó el técnico rojiblanco con una sonrisa. Pero entre líneas, el mensaje fue claro: “No se puede tener un mal día. El que lo tenga, lo pagará caro”.

El conjunto bilbaíno llega tras dos partidos de Liga sin ver puerta, aunque tampoco ha encajado goles. Una sequía que, según su entrenador, no genera alarma: “Somos un equipo que necesita generar ocasiones para marcar, y sabemos que en Europa eso cuesta más”. En ese sentido, recuperar eficacia ofensiva será clave ante un rival que, aunque en una dinámica irregular, sigue siendo muy peligroso en casa.

Y es que el Rangers acumula cinco derrotas consecutivas en Ibrox, una racha inusual en su historia, pero Valverde no se fía. “Su mala racha me parece algo extraordinario. Viendo su último partido, no es lógico que pierdan. Siempre han sido un equipo fuerte en casa”, advirtió.

En el Athletic, todas las miradas estarán puestas en un Aitor Paredes que, pese a haber sido duda por molestias, ha sido incluido en la convocatoria y será una pieza clave en defensa. El central vasco ha coincidido con su técnico al restar importancia al papel de favorito: “No me gusta hablar de eso. El Rangers está aquí por méritos propios. Tienen calidad y son peligrosos en espacios”.

El conjunto escocés también ha vivido una temporada europea de altos y bajos. Tras evitar la ronda de dieciseisavos, eliminó al Fenerbahce en una dramática tanda de penaltis. Su presencia en esta fase es fruto de un bloque sólido y veloz, especialmente letal al contragolpe, como ha destacado Valverde: “Son uno de los mejores equipos de la Europa League a la contra”.

La baja más sensible para los leones es la de Yuri Berchiche, lesionado en el último partido de Liga. Valverde cuenta con opciones de recambio como Lekue o el joven Adama Boiro para ocupar el lateral izquierdo.

Con la final del 21 de mayo en San Mamés en el horizonte, el Athletic afronta esta eliminatoria con la motivación de volver a hacer historia. El recuerdo de la única vez que se enfrentaron a los escoceses —una dolorosa remontada en 1969— sigue presente, y la misión ahora es muy distinta: resistir en Glasgow para rematar la faena en casa.